Las mentiras del Larguero
José Ramón de la Morena nunca se ha caracterizado por una profesionalidad y seriedad muy acentuada. Muy al contrario se ha convertido en un periodista con vicios cada vez más patentes, mucho peores que los que tenía José María Garcia al que tanto vilependiaba hace unos años. El principal vicio de un periodista es la manipulación, y dentro de ello el inventar las noticias, me da igual que sea en un programa de noticias políticas o deportivas. En los últimos días, el programa de deportes de la cadena COPE, conducido por José Antonio Abellán, ha sacado a la luz un extraordinario ejemplo del funcionamiento de PRISA y por ende de la Cadena SER. LA hsitoría discurre el pasado Miércoles, en el que el Real Madrid disputó su de Champions League frente al Monaco. En el programa "El Larguero" se simuló que uno de sus redactores estaba en la puerta de una conocida discoteca madrileña, explicando como habían entrado en ella los jugadores madridistas e incluso entrevistando a Paco Pavón, en central madridista en la entrada de la misma. De todo esto nada era cierto, fue todo una invencíón y manipilación del equipo encabezado por José Ramón de la Morena. A pavon lo entrevistaron en la zona mixta del Santiago Bernabéu, pidiendo incluso un móvil a un compañero de la cadena COPE para no utilizar sus micrófonos inalambricos, y darle así más veracidad. Todos los jugadores nombrados por el redactor de la cadena SER (Antonio Romero), estaban en esos instantes en una restaurante familiar italiano en un comida de los más tranquila, y nunca en un bar de copas. La pregunta es ¿para que?, no entiendo la finalidad de este fraude a su numerosa audicencia, lo único que se me ocurre es la de un intento de perjudicar a los jugadores madridistas. Sin embargo, los que ya sabiamos que este el metodo de trabajo habitual en los medios de comunicación de PRISA, este tipos de informaciones no nos soprenden. Como bien dijo José Antonio Abellan, si hicieron esta para una estúpida noticia deportiva, que no harían entre el 11 y el 14 de marzo para conseguir sus propositos. Sólo pensarlo dan escalofrios, de la manipulación gobbeliana a que estuvimos sometidos.
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