José Luís en el pais de las maravillas

Zapatero ha tenido hoy su discurso de investidura, en el nos ha descrito sus "nuevas" ideas y proyectos para España en los próximos cuatro años. Si hacemos caso a sus palabras de hoy, nuestro país se convertirá en estado maravilloso, cuasi celestial. Pero si nos detenemos un poco más en su discurso sólo encontraremos dislates y vaguedades. Para empezar quiere reformar los estatutos, pero dentro del ámbito constitucional, el único problema esto algo imposible, no es posible reformar los estatutos sin modificar gravemente la constitución. En el tema de Irak, no ha dado fechas, y simplemente dice que si una institución multinacional(ONU, OTAN...) las tropas volverán, es decir empieza a recular, por si es necesario cambiar de opinión. Para la economía sólo dos minutos (aunque bien pensado el la aprendió en dos tardes), que para el PSOE eso de los parados y el crecimiento no es tan importante, aunque dice que seguirá el déficit cero y no subirás los impuestos (habrá que verlo, pero si no lo hace, seguirá la política del PP). Para el plan Ibarreche ni un instante, vaya que molestemos a nuestros amigos nacionalistas. Eso si el discurso estuvo lleno de todas esas estúpidas vaguedades que les gustan a los "progres".
Por otro lado estuvo Mariano Rajoy, que me ha sorprendido gratamente. Lejos de sus habitual tono cansino, estuvo enérgico y crítico a Zapatero todos los defectos de su discurso de investidura. Parece que Mariano se ha dado cuenta que ahora está en la oposición y que hay que plantar cara fuertemente al gobierno del PSOE que promete ser prolijo en medidas descabelladas para los intereses de España. Casí 10 millones de españoles estamos con Rajoy, por lo que se debe esforzar por defender nuestras ideas desde la oposición.
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